dimecres, 2 de juliol del 2008

Aliento

Nueva película de Kim Ki-Duk que se estrena en nuestro país. Y parece que en occidente tiene más seguidores que en Corea. Su anterior película, Time, sólo tuvo 30.000 espectadores.

Por ello, Aliento, es una película de más bajo presupuesto que las anteriores, con 500.000 dólares (y rodada en 15 días) que fue lo que ganó con la venta al extranjero de dos de sus películas: Hierro 3 y El arco. Algo digno de admirar, porque probablemente le cueste mucho llegar a recuperar ese dinero. Pero, al menos, puede trabajar en lo que le gusta.

A los que les guste las anteriores películas de Kim Ki-Duk también le gustará esta. Aunque a mí me ha parecido la más floja de las que he visto (por si alguien quiere calibrar mis gustos, la que mejor me pareció fue Hierro 3). Aún así tiene muchos elementos que la hacen muy recomendable para los aficionados al cine asiático.

La historia, ya de por sí, es original. Una mujer, Yeon, que ya no se habla con su marido ve en la tele a un condenado a muerte y decide ir a visitarlo a la cárcel. Y establece una relación con él como si fueran una pareja que se acaba de conocer. Prepara la habitación en la que se pueden reunir con papel impreso de cada estación y prepara cuatro citas como si estuvieran en un picnic. Empezando por la primavera, verano, otoño e invierno (algo que recuerda, sin duda, a una de sus anteriores películas). Y vemos cómo contrasta su triste vida en casa con su marido, con la alegría que tiene cuando está en la cárcel con su nuevo amante.

También podemos ver el mismo contraste del preso, Jin, cuando está en una pequeña celda junto con 3 presos más, durmiendo en el suelo. Y manteniendo relaciones homosexuales con uno de ellos. Así vemos el paralelismo entre los celos del amante en su celda, con los celos del marido de Yeon cuando este se entera de sus visitas carcelarias.

Kim Ki-Duk también interviene en la película con el curioso papel de jefe de seguridad de la prisión. Haciendo un paralelismo con su faceta de director, aquí vemos cómo observa desde las cámaras de seguridad la relación que mantiene la pareja en la cárcel. Moviendo las cámaras y decidiendo que plano quiere ver de ellos en cada momento.


Lluís Alba