dimarts, 18 de novembre del 2008

Red de mentiras

Red de mentiras es una película que parece más propia de Tony que de Ridley Scott. Una temática (cine de espías) a la que no nos tiene acostumbrados Ridley (a pesar de haber tocado una gran variedad de géneros).

Así nos encontramos con un film de espías que está a medio camino entre las pelis de su hermano Tony y Syriana. Sin llegar a ser ni una cosa ni la otra. Es decir, se deja ver con el piloto automático puesto, no se complica la trama en exceso. Se basa más en las conversaciones que tienen los personajes que en las escenas de acción, de las que no recuerdo ninguna memorable. Tenemos un guión lleno de trucos básicos para que funcione, pero que son demasiado evidentes. Incluso nos muestra una historia de amor que sirve de motivación para el tramo final de la película.

No es que sea una peli desdeñable, por lo menos es entretenida (sus más de dos horas pasan volando). Incluso aporta algunos elementos interesantes, cómo las conversaciones entre los dos espías, DiCaprio en medio de la acción jugándose la vida en oriente medio y a 12.000 kms tenemos a Crowe en su casa combinando su trabajo de espía con su vida familiar. Enfatizando la posición de dos espías con distintos ámbitos de trabajo, pero tan necesario el uno como el otro. Algo que será clave en el desarrollo de la historia al crear un enfrentamiento entre las formas de actuar entre uno y otro personaje.

También me pareció bien que sea moralmente ambigua y que no sea un panfleto norteamericano. Vemos cómo ni la CIA ni el servicio secreto de Jordania escatiman en métodos poco ortodoxos. Sin importarles utilizar gente inocente para conseguir sus objetivos.

Se nota que si en algo es bueno Scott es en saber usar a estrellas cinematográficas para sus películas, algo a lo que nunca renuncia. Tanto Crowe como DiCaprio (y este último tiene más mérito) están bien en sus papeles. Lástima que no sepa o no se moleste en buscar equipo técnico y artístico que también sean estrellas en sus ámbitos para volver a organizar alguna peli que se acerque a sus dos obras maestras. Pero de eso hace mucho tiempo, y posiblemente no vuelva a ocurrir.

Lluís Alba