dijous, 7 de juliol del 2011

Caballeros, princesas y otras bestias

Hace más de 10 años, David Gordon Green conoció a Danny McBride en la Universidad de arte de Carolina del Norte. Durante su estancia, además de aprender su profesión como cineastas, pasaron noches encerrados en alguna pequeña habitación, viendo películas en VHS mientras fumaban porros. Entre las extravagantes ideas que se les ocurrió en su época estudiantil, surgió la idea de realizar una comedia en la que unos caballeros medievales fumaran marihuana.

Poco después David Gordon Green, dirigió su primera película All the real girls (2003), en la que Danny McBride debutó como actor en un papel secundario. Una tragicomedia romántica, al más puro estilo del cine independiente estadounidense que consiguió llamar la atención del nuevo director emergente. Sus carreras tomaron diferentes caminos (pero no su amistad). Mientras Danny McBride comenzó a triunfar como actor en comedias, David Gordon Green iba lanzado hacia el prestigio que otorga rodar dramas de calidad.

Hasta que llegó un giro inesperado en la carrera del director. Para crítica y público, David Gordon Green estaba encasillado en el drama, pero él jamás pensó en dedicarse al cine para pasar por un solo género. Superfumados (Pineapple Express, 2008) supuso su primera comedia, dejando satisfechos a todos aquellos preocupados por seguir sus películas. Volvió a colaborar con Danny McBride, mientras seguían recordando sus tiempos universitarios. Juntos siguieron trabajando en la serie cómica De culo y cuesta abajo (Eastbound & down) de la HBO, emitida en España por Canal +.

Juntos de nuevo, se incrementó la nostalgia por los tiempos de universidad, aquellas habitaciones ahumadas, aquellos braimstormings bajo los efectos de las drogas. ¿Por qué no reemprender aquella idea de una comedia adolescente ambientada en la edad media? Con el reciente éxito de Superfumados, Universal no dudó en dar carta blanca al proyecto. No tardaron a unirse amigos y demás intérpretes de prestigio como James Franco, Natalie Portman, Toby Jones o Zooey Deschanel. Para aprovechar el tirón de su éxito (al menos en EEUU), Danny McBride se reservó el personaje principal de la película, además de dedicarse a escribir el guión.

A pesar de que Caballeros, princesas y otras bestias sea una película totalmente fallida, se puede intuir que, detrás del desaguisado, hay un buen cineasta. Está bien estructurada, las presuntas aventuras son dinámicas y, dentro del humor escatológico, se vislumbra un argumento coherente. Los homenajes a distintas películas de género, no caen en la estúpida caricatura de los Scary movies de turno. Hay referencias a títulos míticos como Mad Max, más allá de la cúpula del trueno (Mad Max beyond thunderdome, 1985) de George Miller y George Ogilvie, Furia de Titanes (Clash of the titans, 1981) de Desmond Davis o Alicia en el país de las maravillas (Alice in Wonderland, 1951) de Clyde Geronimi, Wilfred Jackson y Hamilton Luske.

Probablemente ya sea mayor para estar receptivo a un reiterativo humor sobre drogas y onanismo. Pero tampoco escuché grandes carcajadas del público adolescente que ocupaba la sala.

Lluís Alba

2 comentaris:

Sonix ha dit...

Puf, pues no sé, también he leído en otros sitios que el tipo de humor es muy poco trabajado, que es lo que dices tú, como para adolescentes. Quizás la vea de todos modos, pero mis expectativas ya están bajo mínimos. Con lo mucho que podría dar de sí una parodia de las pelis de aventuras...

Zumbarte ha dit...

Pues sí, es una pena porque podría haber dado más de sí.